Llega la renovación de los contratos de electricidad para muchos ayuntamientos que van a ver disparado su presupuesto energético.
A pesar de las medidas tomadas por el Gobierno, los precios de la energía siguen disparados y nadie se atreve a predecir cuándo bajarán, o si lo harán. Algunos consumidores con contratos de modalidad fija se han salvado hasta ahora de las subidas. Pero el tiempo pasa y para la mayoría ha llegado el momento de renovar. A partir de tres ejemplos reales de administraciones públicas españolas veremos los efectos de la renovación de las compras agrupadas en un momento en que el precio de la electricidad registra aumentos entre el 250% y el 350%. La mala noticia es que no está en nuestras manos bajar el precio de la luz, la buena es que podemos tomar medidas para atenuar su impacto. Te explicamos cómo.
¿Qué ha pasado?
2021 fue el año que marcó el fin de la electricidad barata. Durante el segundo semestre, los precios en el mercado mayorista empezaron a subir de forma continuada a causa de varios factores. Entre los más importantes, el aumento de los derechos de emisión de GEI y el progresivo incremento de la demanda mundial de gas, especialmente en los mercados asiáticos. En el caso de España, además, entró en vigor una nueva estructura tarifaria concebida para fomentar la apuesta por la eficiencia energética y el cambio de hábitos a horas con menor demanda, lo que conllevó el aumento de los precios regulados. Este aumento por sí solo no se tradujo necesariamente en un incremento de la factura, ya que quedaba compensado por la reducción de los precios regulados de la potencia y por la tarifa y el perfil de consumo. Lejos de mejorar en 2022, a raíz de la crisis geopolítica causada por la invasión rusa de Ucraina, el mercado energético se dispara hasta records históricos. El 8 de marzo se alcanzan los 700 €/MWh.
¿Qué medidas se han adoptado?
A la vista de este escenario alcista, el Gobierno y la CNMC empiezan a revisar trimestralmente a la baja los precios regulados con el objetivo de mitigar el encarecimiento en la factura eléctrica. De manera complementaria, se aplica la reducción del IVA al 10% en aquellos suministros con potencias contratadas inferiores a 10kW. Finalmente, se consigue la autorización de Europa para aplicar el “tope del gas” para la producción de electricidad, medida encaminada a reducir el precio de esta tecnología y, por tanto, el del precio diario en el mercado ibérico.
Gráfico: Evolución del mercado eléctrico 2021- 2022. Fuente: Inergy
¿Cómo ha afectado esta subida a las administraciones públicas?
Las organizaciones y administraciones públicas con contratos de electricidad con modalidad fija suscritos con anterioridad a la escalada de precios no deberían haberse visto afectadas por estos incrementos bajo el amparo legal de su contrato. En cambio, pueden haberse beneficiado de las reducciones de peajes y cargos establecidas por las diferentes medidas urgentes adoptadas. No obstante, en algunos casos las comercializadoras no han podido (o no han querido) garantizar las condiciones inicialmente pactadas y han acabado rescindiendo los contratos, o bien, aplicando un fuerte incremento al finalizar su vigencia con el fin de compensar el gasto.
Tres ejemplos reales de administraciones públicas españolas
El tiempo pasa, tarde o temprano los contratos llegan a su fin y toca renovar. ¿Qué pasa entonces? Vamos a ver el caso real de tres administraciones públicas españolas que han renovado recientemente sus compras de energía agrupadas. Se trata de compras agrupadas cuyas entidades asociadas tienen una presencia relevante dentro de la comunidad de usuarios de SIE. Son las compras agrupadas de Diputación Foral de Gipuzkoa (DFG), la Federación de Entidades Locales de las Islas Baleares (FELIB) y la Asociación Catalana de Municipios (ACM).
A continuación, se muestra una comparativa del precio de la energía [€/kWh] que ha pagado cada una de las tres administraciones, por tarifa y periodo, así como el porcentaje de incremento respecto a los antiguos contratos.
Gráfico: Comparativa compra agrupada Diputación Foral de Gipuzkoa. Fuente: Inergy a partir de datos públicos de compras agrupadas
Gráfico: Comparativa compra agrupada Federación de Entidades Locales de las Islas Baleares. Fuente: Inergy a partir de datos públicos de compras agrupadas
Como se observa, en la mayoría de los períodos y tarifas, el precio de la electricidad registra aumentos entre el 250% y el 350%, alcanzándose mayores cifras en algunos casos. Estos incrementos impactarán finalmente en el importe de la factura tensionando los presupuestos municipales.
Gráfico: Comparativa compra agrupada Federación de Entidades Locales de las Islas Baleares. Fuente: Inergy a partir de datos públicos de compras agrupadas
En el caso de la Asociación Catalana de Municipios cabe mencionar que la contratación será objeto de revisión trimestralmente en base a las cotizaciones del mercado de futuros, con el fin de modular los precios ante una eventual bajada.
¿Qué medidas podemos tomar?
Como hemos visto las razones que explican el incremento de los precios son complejas y diversas. Y ahora mismo no está a nuestro alcance bajar el precio de la luz. Pero hay otras medidas que sí podemos tomar para mitigar el impacto de estas subidas. Cualquier administración u organización debería considerar, hoy más que nunca, su responsabilidad en la gestión energética de su parque de edificios y alumbrado. Hay muchas acciones que podemos llevar a cabo para reducir nuestra factura sin que impliquen una gran inversión. Para empezar, es necesario conocer y analizar nuestro gasto energético y su evolución. De esta manera, podremos ajustar las potencias contratadas a la demanda real de nuestras instalaciones evitando tener que pagar penalizaciones. También podemos reducir los consumos de reactiva o dar de baja los suministros sin utilización. Es importante buscar nuevas modalidades de contratación u ofertas que se ajusten mejor a nuestro perfil de consumo y a las necesidades de nuestra organización. Podemos detectar errores en las facturas emitidas por la comercializadora o programar alarmas que nos adviertan de un sobreconsumo en uno de nuestros suministros. Con un sistema de contabilidad y gestión energética robusto y eficaz como el que ofrece Inergy podemos controlar y reducir nuestro consumo energético y optimizar los componentes de nuestra factura para asegurarnos de no pagar más de lo necesario.
Podéis consultar la evolución del mercado ibérico de la electricidad y de futuros en https://energymarket.inergy.online/es